Bienvenida Verónica, ¿Qué es lo que haces? ¿Por qué elegiste este rubro? ¿Cómo se te ocurrió la idea? Tengo un vivero boutique en la provincia de San Juan, donde ofrecemos todo tipo de plantas de interior, de parque, aromáticas, cactus, también herramientas, tierra, abonos y todos los complementos necesarios para cuidar nuestros espacios verdes. En El Viverito tienen un lugar especial los objetos decorativos que aportan mucho color y vida al jardín. También ofrecemos regalos empresariales y cactus para souvenir.
Quisimos darle una vuelta de tuerca a la idea del vivero convencional. Crear un espacio donde no solo se vean cantidad de plantas todas igualitas, sino mezclar el verde con muchos adornos que estimulen nuestros sentidos y generar un ambiente que transporte y llene de magia a todas las personas que vienen a conocerlo. Tenía que ser un lugar especial, donde también nos guste trabajar y pasar nuestros días. Siempre buscamos sentirnos bien para poder transmitir ese bienestar a las personas que se acercan a nuestro negocio. Es un vivero con música y mucha energía, así arrancamos nuestras mañanas.
¿En qué año comenzaste el emprendimiento? ¿Qué te impulso a iniciar tu propio negocio? El Viverito nació en febrero de 2015, una noche de domingo, cuando estábamos con los últimos detalles para arrancar la semana siguiente, y debido al calor dejamos la puerta abierta, esa noche hicimos nuestra primera venta. En ese instante nos dimos cuenta que el negocio nos iba a marcar el ritmo a nosotros. Y comenzaba a pintar su propia personalidad.
Lo que me impulsó fue una necesidad, que es cómo nacen muchas veces los proyectos. Yo me encontraba sin trabajo y sin pensar demasiado comencé a tirar CV por muchas empresas, de alguna forma tenía incorporado que “eso es lo que debía hacer”, conseguir un trabajo formal en una empresa, con un sueldo fijo y estabilidad económica. Pero gracias a mi pareja, que es una parte esencial de este proyecto, pude entender que mi felicidad se encontraba en otro lugar, mucho más auténtico y movilizador: Mi propio negocio. A los dos nos encantan las plantas y siempre fantaseamos con tener un vivero, cuando nos conocimos esa idea tomó forma y nos pusimos manos a la obra para concretarla.
¿Alguien te ayuda? ¿Cuántas y quienes son las personas que colaboran con vos? Por el momento somos mi novio y yo, él gestando ideas y algunos productos y yo atendiendo el negocio. Pero nos da mucha felicidad poder generar ingresos extra a las chicas que se dedican a pintar o hacer artesanías, macetas en cerámica, mosaiquismo, mandalas tejidos. Todas tienen un estilo propio y le ponen mucha onda a lo que hacen. Algunas de ellas se dedican full time y otras lo hacen en sus ratos libres. Cada vez podemos comprar más productos dentro de la provincia, ese fue siempre nuestro objetivo principal.
¿Qué te diferencia de productos/servicios similares? Bueno, El Viverito es un espacio pequeño por lo tanto la atención es muy personalizada. Nuestro interés no es solo vender plantas sino asesorar y ayudar en todo lo que podamos para que el cliente entienda los cuidados y el mantenimiento del producto que se lleva a casa. Que en definitiva es un ser vivo y no puede ser olvidado o solamente utilizado como un adorno más en su hogar. Creemos que lo que más nos diferencia de los viveros convencionales es la onda y personalidad que aportan los coloridos objetos de decoración. Tratamos de incentivar a las personas a que dediquen más tiempo a sus espacios verdes, y quienes no cuenten con esos espacios, puedan recrearlos en un balcón, patio o incluso en un rincón dentro de casa.
El Viverito es muy dinámico, está siempre en constante cambio y evolución, lo que conlleva mucho trabajo y dedicación. Tratamos de ofrecer productos novedosos y originales.
Este año comenzamos a organizar Cursos de Jardinería. Ese tipo de actividades junto con otros servicios como El Viverito Delivery (los miércoles hacemos reparto a domicilio), también marcan la diferencia con otras empresas del rubro.
¿Cómo ves tu emprendimiento en el 2016? El 2016 ya comenzó recargado para El Viverito, con los cursos de jardinería y todos los productos y servicios nuevos que se van sumando. Nuestro objetivo es seguir divirtiéndonos como lo hacemos ahora, cada vez que generamos una idea o producto nuevo, se convierte en una actividad lúdica que nos permite volver a ser niños en un mundo de adultos.
¿Qué es lo más lindo de ser dueña de tu propio negocio? Lo más lindo de ser mi propio jefe es que tengo la libertad de generar ideas y poder concretarlas sin miedo, llegar a verlas materializadas es lo que más me motiva. No me siento ahogada en una rutina sin sentido.
¿Hay algo que no harías si volvieras a empezar? ¿Qué cosas? Creo que no cambiaría nada. Cada experiencia laboral me aportó distintos conocimientos, cada una de ellas fortaleció mi temperamento y personalidad. De los fracasos y desaciertos solo obtuve más confianza en mí misma y en mis capacidades.
Por último: ¿Qué consejo le darías a las mujeres que todavía no se animaron a iniciar su propio negocio? Que no piensen tanto, solo tienen que dejarse llevar por algún viejo sueño, de esos que parecen lejanos e imposibles. Y que no teman al fracaso, es parte del proceso y del aprendizaje. Algo muy importante es que sean auténticas, que impriman su sello a cada idea, producto o servicio que vayan a ofrecer. Hay una cita que siempre tengo muy presente:”Si sigues a la multitud podrías perderte en ella.”
Algo más que quieras agregar… El Viverito no es mi primer emprendimiento, anteriormente tuve otros proyectos que no funcionaron, pero decidí seguir apostando por mi independencia y mi paz interior. Y sí, soy emprendedora y ese es mi motor.
¿Tenes alguna promo si mencionan SOY EMPRENDEDORA? Si mencionan Soy Emprendedora obtendrán un 10% de Descuento en toda la línea de macetas plásticas.
DATOS DE CONTACTO:
Nombre: Verónica Pelaez
Nombre del emprendimiento: El Viverito
País: Argentina
Provincia: San Juan
Ciudad: Rivadavia
Facebook: www.facebook.com/elviveritoalmacendeplantas
