Cuenta la leyenda que un buen hombre, habiendo transitado una vida de esfuerzo, de honestidad y de fe, en su camino hacia el paraíso, se encuentra con Dios, quien lo interroga sobre el resultado de su existencia para evaluar sus opciones (algo así como un examen para pasar a un grado mejor, o repetir el que ya hiciste)
Relajado el hombre confía en aprobar la evaluación pues sabe de la honestidad de su trayectoria.
Entonces Dios le pregunta: ¿Cuántas conferencias diste?
Conferencias? Yo? No, yo conferencias no di ninguna (respondió asombrado)
Entonces…continuó preguntando Dios… ¿A cuantas personas mejoraste con el poder de tu palabra?
Yo? Pero si yo siempre fui de pocas palabras.
Entonces…. ¿Cuantos libros escribiste?
Señor, (respondió más sorprendido aún) Yo, yo no escribí ningún libro.
Dios con voz grave dijo seriamente: Hijo mío…. entonces no has aprovechado el tiempo de vida que te he dado.
Pero Señor, yo fui un buen hombre, trabajé día a día para ganar el pan para mi familia, obedecí respetuosamente a mis patrones, cumplí siempre con mi deber… ¿Por que me dices eso? ¿Qué debería haber hecho?
Hijo, no se trata de lo que debías hacer, sino de lo que podías hacer y no hiciste. A cada uno doy un don especial y a veces más. En tu caso te dí, el poder de la palabra, y nunca lo desarrollaste. Ese era tu don, y no lo usaste. Tus mejores momentos eran los que dedicabas a la lectura, o cuando les contabas cuentos a los niños, o cuando te quedabas absorto escuchando los discursos de párrocos y políticos. Escuchabas que decían y también como lo decían. Y yo se que en secreto cuando nadie te veía recitabas poesías que tu mismo habías escrito. Esas eran las señales de tus dones.
Siempre es todavía, para que puedas tomar conciencia de tus dones, tus talentos y puedas sacarle el máximo partido.
Para ayudarte a reflexionar sobre ello, respóndete a estas preguntas:
Cuándo el tiempo pasa sin que te des cuentas, ¿Qué estás haciendo?
¿A qué dedicabas el tiempo cuando jugabas de pequeño?
¿Hay alguna tarea que te parezca como un juego?
Si todas tus necesidades estuvieran cubiertas: dinero, tiempo y afecto, ¿A qué te dedicarías?
Hola tengo 50años hasta Enero de este año tenia trabajo,cuando me quede sin el,senti algo muy raro,no queria estar mas en ese lugar,pero lo extrañaba,gracias a mi familia y amigos comenze con este microemprendimiento
Diseño bijouterie con piedras engarzadas,cadenas en acero,cordones etc
Mi gran Don,es vender,me encanta tratar con la gente
Me gusta relacionarme,podes hacer de nexo entre el que necesita algo y el que lo tiene
Ahora estoy por estudiar Oratoria
Tengo que buscar lo que me haga feliz
Dedicarnos a nuestros talentos no solo nos traerá beneficios personales, sino que también podremos hacer felices a mucha más gente durante o después que lo realicemos.
Totalmente!!!